Sólo se me ocurre ese adjetivo: salvaje. Aun hoy, 28, me estoy recuperando de lo vivido.
El 23 concierto con (lo:muêso), brutal, con temas nuevos, y una taja mía importante. El 24 cena en casa de los padres, me regalaron la Play Station 2 (jeje, yo voy siempre con retraso, cuando salen nuevas me compro las viejas), y estuvo divertido.
El 25 fue el despiporre máximo. Comenzamos a las 5 de la mañana, con la visita de mi suegro con churros!!! Que cabrón… como nos reimos. Fue con la moto haciendo la ronda despertando a todo el mundo, nosotros fuimos los primeros. Después, comida en casa de los suegros, y la post-comida fue un infierno. Comenzamos a beber chupitos (grappa, limoncello, absenta, becherova, tequila…)… para haber muerto ahi mismo.
El 26 tuvimos comida en casa. Los canelones salieron estupendos, mucha gente repitió y todo! El problema vino en la post-comida de nuevo, con las palomitas y el whiskhy! El bingo fue movidito, jeje, no gané ni una partida, y eso puede ser por que a lo mejor no veia los números del todo bien… Después vinieron Miguel y Mónica, jugamos al Buzz, y gané… pero mis recuerdos de ese momento son algo difusos…
Vaya brutalidad de fiestas, otro más como éste y no lo cuento. Ayer, jugando el partido de fútbol, el cuerpo no me iba… así que toca desintoxicarse y comenzar a trabajar porque llega un enero movidito.
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