Pues al final el balance fue positivo, aunque el viernes tuve un bajón de esos que hacen historia. El viernes pagaron un total de 28 personas, y con invitados llegaríamos justos a las 50. Me pareció injusto. Pero dando vueltas al asunto, ví una serie de fallos que hay que subsanar (aunque contra la vida no se puede luchar, y hay cosas que se escaparon por completo a mi control).

Murdo molaron bastante, Bloomington crecieron respecto al bolo del Apolo, y (lo:muêso) volvieron a hacer un conciertazo para no olvidar.

El día siguiente fue mejor. Pagaron 58 personas, y había más de 100 en la sala, porque había muchos más invitados (2 bandas de Madrid es lo que tiene). Se veia muy llena. De los conciertos, Doss me gustaron en el escenario aunque aun me gustaron más como personas. Raydibaum hicieron su mejor concierto otra vez. Y Peluze presentaron temas en castellano, que siguen siendo tan buenos como antes.

Tras desconectar de la realidad el viernes, el sábado hubo una pequeña fiesta y acabamos en un sitio freak dónde los dj´s iban vestidos de La Naranja Mecánica, los camareros de Marilyn y se proyectaban imágenes de películas. Todo muy surrealista.

Entre medio de todo esto, Cris, Núria y yo estuvimos de turistas por Madrid, incluyendo una visita histórica al Retiro. Nos pillamos una barca y lo pasamos muy bien.

Fue un fin de semana raro, pero del que hay que sacar conclusiones y mejorar muchas cosas. Al final se trata de eso, de aprender y mejorar.