Repasar en unas lineas todo lo vivido en Italia es poco más que imposible, así que intentaré contar las cosas muy por encima de manera cronológica.
El primer día viajamos desde las 6 de la mañana hasta las 6 de la tarde, parando sólo 2 veces (en una de ellas compré palomitas italianas, deliciosas). En 12twelve sólo conduce Jaume, así que fue él quién se tragó toda la carretera. Es una pasada lo buenas que son las autopistas en Francia, y tb lo caras que son! En el primer día, nos gastamos 200€ entre peajes y gasolina.
Llegamos a Ferrara, y allí nos encontramos a Gianluca, el promotor del tour, un tio majísimo. Nos llevó al Zuni, sala de exposiciones, bar, … un sitio pijete dónde abríamos el tour. Ya desde un inicio, el trato era tremendo. Bebidas, risas, buenas caras… El chico de la sala era igual que el DJ Amable. Probamos, y casi a las 20.30h, comenzamos el bolo, con cerca de 100 personas, algunas salían y entraban para fumar (en Italia ya no se fuma en ningún sitio), y mientras, yo descansaba en el puesto de merch con una chica al lado en la entrada que llevaba la falda más corta de la historia.
El concierto fue bien aunque el sonido no tanto. Aun así, vendimos unos 15 discos, chapas, 1 vinilo … un gran comienzo. Aunque lo mejor estaba por llegar, que fue la cena: spaghettis con aglio, olio e peperoncino (como all i oli con algo más), pinchitos y lasaña. Para morirse, vamos. Creo que allí pillamos fuerzas para toda la gira.
Tras la cena, paseo por Ferrara (precioso) y a dormir al hotel.
El día siguiente tocábamos en Abano Terme, un sitio pequeño y turístico por las termas que hay allí. En el camino, comenzó el humor con el «fascio» o «faschio». Habían monumentos de las guerras mundiales, y todo era muy… como decirlo… muy ‘fascisti’. Se nos metió la palabra en el cuerpo, y ya no nos abandonaría en toda la gira.
En Abano Terme nos esperaba el promotor, que era un poco parras. De hecho, nos llevó al hotel (el mejor de toda la gira) y se perdió 2 veces! Pero bueno, era majete.
En el hotel tuvimos sesión de guitarra española, «ritmo de la noche», duchas y vimos algo la tele. Tras eso, fuimos a la sala, cenamos (la peor cena del tour) y tocaron. Sólo se vendieron 2 discos, aunque el sonido mejoró mucho. Fue el único día con teloneros, que trajeron a mucho público.
Al día siguiente comimos en el mismo hotel, que molaba mucho, una pizza realmente exquisita y unos spaguettis. Tuvimos una conversación muy interesante sobre el futuro del grupo un poco salpicada por el vino que nos ponían en todos lados.
Por la tarde llegamos a Urbino. Allí conocimos a Stefano, al técnico peruano, su chica (el mejor escote de toda la gira) y al resto de amigos que haríamos esa noche. Urbino fue nuestro Don Benito particular. Vaya noche. La cena fue en el casco antiguo, que era IMPRESIONANTE. Yo pedí una pizza de atún y jamón dulce, y la camarera me miró extrañada, aunque luego lo probaron y dijeron que estaba rica.
En la cena conocimos a un profesor que estaba también metido en la asociación cultural que montaba el concierto. Vino con su hijo, que era Rafael Nadal, y que me preguntó si yo jugaba a juegos de rol porque tenía pinta.
Bebimos mucho vino e hicimos muy buen rollo con Stefano y compañía. Tras eso, el concierto fue el más punk que recuerdo a 12twelve. Jaume acabó subido encima de una de las mesas, tocando entre la gente. Vaya imagen más impresionante, que contrastó con el inicio del concierto… nos hicieron una pequeña encerrona, que era tocar mientras un poeta de Urbino leia unas poesias. El experimento resultó, pero al no entender lo que decía, los pobres no sabía ni que tocar… Luego descubrimos que todo estaba preparado, porque en la ciudad habían carteles que ponían: «El poeta XXX recitará poesía de su último libro con el acompañamiento del grupo 12twelve de Barcelona». Tremendo.
Tras el concierto llegó la debacle. Bebimos mucho, yo mezclé tequila, limoncello, vino y whisky, y encima cambiamos hasta 2 veces de local, y para ellos nos subíamos en el coche del técnico de sonido, que era rollo Carlos Sainz.
El resultado fue una borrachera épica, con los 12twelve bailando raï y todas las chicas alrededor pipeando al máximo, y yo fuera del local echando todo lo comido desde mi primera comunión. Ni recuerdo como llegamos al hotel, que era un hotel de semilujo, increible.
El día siguiente nos levantamos a las 13h, y comimos en Urbino, otra vez en el casco antiguo. Yo estaba para el arrastre, pero conseguí comer y conseguí llegar a Pistoia, aunque fui mareado todo el viaje. Eso sí, fue bajarme de la furgo y con el fresquito que hacía, se me pasó todo.
En Pistoia nos esperaba Lorenzo, un joven de 20 pocos años, que era la sonrisa en persona. Que majo. Tocamos en la mejor sala de todas, un pequeño teatrito metido en La Casa de la Música del pueblo, dónde tb habían salas de ensayo. Por primera vez, se microfoneó todo y el sonido fue impecable (está grabado en minidisc y con 2 cámaras de video). Cenamos de muerte, y en el concierto más de 130 personas, la mitad sentadas. 12twelve lo bordaron, hicieron hasta 4 bises a petición de la gente, y vendimos muchísimo, además de hincharse a firmar discos. Al final, dejamos allí los instrumentos para poder aprovechar el day-off del día siguiente, con la ayuda de Lorenzo y la gente del sitio, que eran un encanto.
Y el día siguiente nos fuimos a Florencia. Estuvimos unas 3 horas, visitamos todo lo visitable, yo me comí un helado que se me caian las lágrimas de lo bueno que estaba, y nos hicimos muchas fotos. Recogimos el equipo, Lorenzo me dio el DVD del concierto y me dijo que le habían encantado Ghouls´n´Ghosts, y tiramos hacia Forlì, dónde vive Gianluca y dónde dormíamos esa noche.
Pasé todo el día con el helado, hasta las 19h, que llegamos a Forlì y me comí 2 trozos de pizza deliciosa. Dejamos los trastos en casa del jefazo, y nos fuimos a cenar. Repetí spaguettis y el resto improvisaron, con éxitos diferentes. Al llegar a casa de Gianluca, dormimos hasta el día siguiente, aunque tardamos unas 3 horas en dormir… fue lo más parecido a unas colonias que recuerdo. Sólo nos faltó ir a la habitación de las chicas a molestar para estar completamente metidos en las colonias de la escuela, madre mía que noche más divertida…
El día siguiente comimos en casa de ellos, nos hicieron pasta con pesto, muy rica, y aprovechamos las últimas horas para hacer las compras de rigor. Forlì es muy bonito, aunque menos que otras ciudades. Nos acompañó una amiga de Gianluca, de origen asiatico, que estaba como una regadera. Tenía algo de fantasma que daba miedo.
En el Clan Destino, la sala dónde tocábamos, ocurrió la anécdota mítica de la gira. Habían 2 transexuales en la barra, mirando al grupo como montaban y probaban. De repente, una se levanta y le dice a Javi: «Tú, con el contrabajo, eres el más sexy». La cara de Javi fue increible, y las risas a partir de ese momento, inevitables.
Cenamos de lujo, raviolis con queso de cabra y gorgonzola, y después hojaldre de carne y puré de patatas. Genial. Tocaron bien, pero el público estaba frío. Aun así, vendimos 10 discos y conseguimos el objetivo de llegar a los 500€ de merch en toda la gira.
Nos despedimos de Gianluca con tristeza, y dormimos en casa de Morena, la promotora, un personaje tb bastante mítico. Ya al día siguiente, recogimos los trastos del local, tomamos un café y emprendimos la marcha hasta Barcelona, dónde llegamos 14 horas después, echos polvo pero tremendamente felices.
Lo cierto es que las puertas que ha abierto esta gira son muchas. En los próximos días, iré concretando más acciones de éste tipo, para intentar que 2007 sea el año de la apertura de Aloud/SiaC hacia Europa. Tiene pinta de que las cosas irán bien por allí arriba, espero que así sea.
3 Comments
nosotros también queremoooos!!! pizza y espagetis y helados y kilómetros y todo esooo!!
que envidia…
felicitats per tot, tiu! a veure si som capaços de trobar una setmaneta algun dia per fer les europes. quina enveja…
ah, i pobre Jaime… a veure si us treieu el carnet de conduir, que ja va sent hora!
Envidia sana te tengo amigo!!!
Una amiga estuvo apunto de acercarse a Ferrara pero no pudo ser…
Os quiero!