Ayer volví a limpiar mi mesa de trabajo. Un acto que tengo que repetir cada 2 meses o así, porque soy una persona francamente desordenada.

Ayer por eso descubrí que uno de mis problemas es que me falta espacio, y el poco espacio que tengo no está bien gestionado ni ordenado. Todavía estoy dándole vueltas al cómo voy a reordenarlo todo.

De momento, tiré todo lo de la mesa al suelo y he dejado la pantalla, el teclado, el ratón, los altavoces y el portátil. Y joder, da un gustazo sentarse a hacer cosas…